El violinista Ilya Kaler, discípulo de Leonid Kogan y Víctor Tretyakov, es el único intérprete que ha ganado los tres concursos más prestigiosos de violín del mundo: el Tchaikovsky, el Sibelius y el Paganini. Se presentó junto a prestigiosas orquestas como las filarmónicas de Leningrado, Moscú y Dresden, la Sinfónica de Montreal y la Orquesta de la Radio de Berlín, entre otras. Realizó giras como solista por Europa, Este de Asia, la ex Unión Soviética, Japón, Alemania, Irlanda, Israel, Italia, Singapur, Corea, Taiwán, Inglaterra y Venezuela. Paralelamente a su carrera solista, se dedica a la música de cámara.

El programa estará integrado por tres obras del siglo XX con diferentes estéticas: una obra concertante post-romántica poco interpretada de Aram Khachaturian (1903-1978), una sinfonía del inglés Ralph Vaughan Williams (1872-1958), a 50 años de su muerte; y una pieza sinfónica del mexicano Eduardo Gamboa (1960).

El concierto comenzará con Los tres ríos de Gamboa, primer número de la suite sinfónica Culiacán, compuesta en 2004 en conmemoración del 473º aniversario de esa ciudad mexicana. Eduardo Gamboa, graduado como guitarrista en el Trinity College of Music de Londres, se dedica enteramente a la composición desde 1985, teniendo en su producción música de concierto, tanto de cámara como sinfónica, así como música para teatro, cine y televisión. La pieza sinfónica Los tres ríos hace alusión a los ríos Humaya, Tamazula y Culiacán que convergen en la ciudad mexicana de Culiacán: trata de no ser descriptiva, presentando marcados contrastes inspirados en la naturaleza de la geografía del lugar.

La primera parte del programa culminará con el violinista Ilya Kaler interpretando el Concierto para violín y orquesta en re menor de Aram Khatchaturian. Este compositor armenio, recordado por su ballet Espartaco, estudió y trabajó toda su vida en la Unión Soviética, donde realizó una abundante producción que abarca tres sinfonías, diversos ballets y conciertos para instrumentos solistas. El Concierto para violín y orquesta está dedicado al gran violinista ruso David Oistrakh, quien lo estrenó en Moscú en 1940, y presenta las características propias del compositor como el manejo rico del ritmo y melodías inspiradas en el folclore armenio, junto al virtuosismo extremo que le presenta al instrumento solista.

La segunda parte estará dedicada a la Sinfonía Nº 2 "Londres" de Ralph Vaughan Williams. Este compositor inglés, reconocido por utilizar melodías folclóricas en estructuras tradicionales, tiene en su producción nueve sinfonías. La Sinfonía N° 2 "Londres", estrenada en 1914 y luego revisada varias veces, nació a partir de unos bocetos para un poema sinfónico sobre Londres que fueron adaptados en la forma tradicional de sinfonía. Más allá de que no siga una historia, la obra muestra diferentes escenas de esa ciudad desde las campanas de Westmindter, los gritos callejeros de los floristas y también algunos aspectos sombríos de la vida urbana, que culminan con el curso ondulante del río Támesis.

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