Jueves, 02 de Mayo de 2024

Clásica y Ópera | Ópera

El castillo de Barba Azul de Béla Bartók

El castillo de Barba Azul de Béla Bartók

No es una ópera convencional. No hay obertura, arias ni dúos. En el año en que compuso esta ópera (1911), el joven Bartók estaba, como era de prever, cerca del impresionismo de Debussy. Los refinados colores de la orquesta, los sonidos extraños, que iluminan los profundos procesos del alma, la declamación intensa: todo esto es herencia del impresionismo y al mismo tiempo auténtica propiedad de Bartók.








Ópera en un acto. Libreto de Béla Balász. El poeta ha intentado abarcar nada menos que las cuestiones fundamentales de la vida humana y la eterna lucha de los sexos en una acción extraña, protagonizada sólo por dos personajes. Judith, impulsada por un ardiente amor, ha seguido a Barba Azul a su castillo.

Allí, Judith conoce todos los misterios del alma humana que todavía eran extraños para su juventud. Pide y obtiene de su amado las llaves de siete puertas misteriosas, y las abre una por una. Detrás de la primera hay una cámara de tortura: son los tormentos del propio Barba Azul los que están encerrados allí. Detrás de la segunda puerta hay un depósito de armas, las del hombre en la lucha cotidiana por la vida. A continuación se pone al descubierto un tesoro, pero todas las joyas están manchadas de sangre: el hombre no puede lograr nada en este mundo sin hacer daño. Luego Judith ve un magnífico jardín detrás de la cuarta puerta; pero cuando mira más de cerca, la tierra, de la que brotan los árboles y las flores, está impregnada de sangre. La quinta puerta muestra un amplio paisaje; surge de él un torrente de luz cegadora, pero una nube que se extiende sobre él parece arrojar sombras tenebrosas, teñidas de sangre. Detrás de la sexta puerta hay un mar: son las lágrimas, los dolores secretos de una vida. Barba Azul entrega las llaves a Judith, que lo apremia, con una vacilación creciente; desea abrazarla y por medio de su amor escapar de su pasado. Sin embargo, Judith, a causa de su inclinación por este hombre extraño (que en realidad es el arquetipo del hombre), y tal vez por el eterno deseo femenino de redimirlo, le pide también la última llave. Y de esta manera descubre en el séptimo aposento a las mujeres anteriores de Barba Azul: las amantes de su mañana, de su mediodía y de su tarde. Mientras Barba Azul le pone el manto de estrellas y la diadema de la noche, Judith se sitúa en la fila de sus predecesoras. De este modo Barba Azul se queda solo, tal como estuvo y estará siempre.

No es una ópera convencional. No hay obertura, arias ni dúos. En el año en que compuso esta ópera (1911), el joven Bartók estaba, como era de prever, cerca del impresionismo de Debussy. Los refinados colores de la orquesta, los sonidos extraños, que iluminan los profundos procesos del alma, la declamación intensa: todo esto es herencia del impresionismo y al mismo tiempo auténtica propiedad de Bartók, que con esta ópera, desconocida durante mucho tiempo, escribió una obra maestra. El estreno en Budapest, el 24 de marzo de 1918, último año de la guerra, fue una hazaña. Esta obra profunda nunca será una ópera para el gran público; pero sí tal vez un hito en la historia del teatro musical de nuestro tiempo.

Béla Bartók (1881-1945)

El más grande compositor húngaro de la primera mitad de nuestro siglo se ha convertido con sorprendente rapidez en un clásico. Indiferente a las consignas de su época, siguió el camino de un verdadero músico; nunca perdió la estrecha relación con las melodías populares de su patria y creó un estilo propio empleando muy libremente la tonalidad, sin abandonarla del todo. Quizá los impulsos más importantes de su estilo procedan del ritmo. Las producciones más logradas de Bartók están fuera del tema de este libro, en el ámbito de la música orquestal y de la música instrumental en general. Se presentó en el campo de la escena con dos ballets-pantomima (El príncipe de madera, 1916, y El mandarín maravilloso, 1919), y con la ópera breve El castillo de Barba Azul. El compositor nació el 25 de marzo de 1881 en Nagyszentmiklós, en el sur de Hungría, y murió el 26 de septiembre de 1945 en Nueva York, en las circunstancias vejatorias de la emigración.

  • El castillo de Barba Azul de Béla Bartók
Más Notas
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Breves

  • HECTOR BERLIOZ

    Fue un creador cuyo obstáculo fue la intransigencia de la mayoría de los músicos en casi todos los temas, desde su apoyo al uso del saxofón o a la nueva visión dramática de Wagner. Su vida fue excéntrica y apasionada. Ganó el Premio de Roma, el más importante de Francia en aquel momento, por una cantata hoy casi olvidada. Su obra musical es antecesora de estilos confirmados posteriormente.

  • El aprendiz de brujo de Paul Dukas se basa en una balada de Goethe. Es un scherzo sinfónico que describe fielmente cada frase del texto original.

  • La primera ópera de la que se conserva la partitura es Orfeo de Claudio Monteverdi. Se estrenó en Mantua en 1607, con motivo de la celebración de un cumpleaños, el de Francesco Gonzaga.

  • La obra que Stravinski compuso desde la época del Octeto de 1923 y hasta la ópera The Rakes Progress de 1951, suele considerarse neoclasicista.

  • En la Edad Media encontramos la viela de arco, de fondo plano y con dos a seis cuerdas, que se perfeccionó en la renacentista, hasta llegar a su transformación en el violín moderno a partir del siglo XVI, cuando se estableció una tradición de excelentes fabricantes (violeros) en la ciudad de Cremona.


Citas

  • DANIEL BARENBOIM

    "Un director no tiene contacto físico con la música que producen sus instrumentistas y a lo sumo puede corregir el fraseo o el ritmo de la partitura pero su gesto no existe si no encuentra una orquesta que sea receptora"

  • GEORGE GERSHWIN

    "Daría todo lo que tengo por un poco del genio que Schubert necesitó para componer su Ave María"

  • GUSTAV MAHLER

    "Cuando la obra resulta un éxito, cuando se ha solucionado un problema, olvidamos las dificultades y las perturbaciones y nos sentimos ricamente recompensados"

  • FRANZ SCHUBERT

    "Cuando uno se inspira en algo bueno, la música nace con fluidez, las melodías brotan; realmente esto es una gran satisfacción"

  • BEDRICH SMETANA

    "Con la ayuda y la gracia de Dios, seré un Mozart en la composición y un Liszt en la técnica"

MULTIMEDIA

  • Finlandia

    Jean Sibelius

  • Quando Men Vo

    Anna Netrebko (Musetta)

  • Vesti la giubba

    Mario Lanza (Canio)

  • Muerte del ángel

    Astor Piazzolla

  • Hágase la Música en Radio Brisas

    Ciclo 2011 - Programa N° 15

  • Che gelida manina

    Luciano Pavarotti (Rodolfo)

  • Danza Eslava N° 1

    Antonin Dvôrak

  • Rapsodia en blue

    George Gershwin

Intérpretes

Voces

Julio Sosa

Julio Sosa

Sin lugar a dudas, Julio Sosa fue el último cantor de tango que convocó multitudes. Y en ello, poco importó que casi la mitad de su repertorio fuera idéntico al de Carlos Gardel, aunque también es cierto que interpretó algunos títulos contemporáneos. Como dice el investigador Maximiliano Palombo, fue una de las voces más importantes que tuvo el tango en la segunda mitad de los años cincuenta y principios de los sesenta, época en que la música porteña pasaba por un momento no demasiado feliz".

Músicos

José Libertella

José Libertella

Los que disfrutaron de su música sobre el escenario lo recordarán, seguramente, con esa pasión que ponía cada vez que acomodaba el paño sobre sus rodillas, tomaba el instrumento y cumplía con el ritual de la función. Y quizá como ese hombre apasionado al que le saltaba la tanada ajustando cada detalle, preocupado porque el sonido o las luces no eran los óptimos. José Libertella nació en Calvera, Italia, su padre Juan construía tejas y trabajaba la tierra, fue el primero en emigrar a la Argentina. José lo siguió el 7 de junio de 1934, tenía once meses, viajó en el buque Principessa María en brazos de su madre.

Voces

Oscar Ferrari

Oscar Ferrari

Su identificación con la música y la poesía de Buenos Aires es tan extensa, que resulta imposible resumirla en el espacio destinado habitualmente a estas semblanzas. Sin embargo, la claridad expresiva y la modestia de Oscar Ferrari, allanan el camino que es necesario recorrer para acercar su figura y su pensamiento al público, ávido de conocer detalles de quienes se han ganado un hondo prestigio dentro del universo del tango. Cantó en las orquestas de Juan Caló, Alfredo Gobbi, Edgardo Donato, Astor Piazzolla y José Basso.

Junín, 13/06/2016

Presentaron “Tango en Junín”

Los amantes del tango podrán disfrutar de diversas actividades durante cinco días en Junín. El intendente la Ciudad, Pablo Petrecca, presentó oficialmente “Tango en Junín”, un importante ciclo cultural que se desarrollará entre el 13 y el 17 de julio próximos e incluirá la realización de la preliminar del Festival y Mundial de Tango BA 2016.

Mar del Plata, 30/05/2016

Amelita Baltar en el Teatro Colón

El sábado 11 de Junio a las 21 hs se presentará en el Teatro Municipal Colón la gran cantante Amelita Baltar, acompañada por la Orquesta Municipal de Tango que dirige el Maestro Julio Davila y el pianista Aldo Saralegui como invitado especial. Luego de su presentación en Mar del Plata, la cantante estrenará un nuevo espectáculo: "Noches de Kabaret" en el Teatro Maipo de Buenos Aires.

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